Los emblemáticos Bares Notables porteños en peligro de desaparición ante la pandemia

Café Tortoni, De los Angelitos, Homero Manzi, La Perla de Caminito, La Biela, El Querandí…son tan sólo unos pocos de los tantos Bares Notables de la Ciudad, ligados al eje cultural del que hacer porteño y visitados cada mes por gente local  junto a cientos de turistas nacionales y extranjeros que anhelan conocerlos.

Su actividad, vinculada a la gastronomía y el turismo, hoy se encuentra paralizada dada la pandemia del coronavirus y resulta imposible hablar de una reapertura cuando el virus se encuentra en plena vigencia y el sector está inhabilitado para abrir con la presencia de comensales. 

 De los más de 80 Bares Notables que regalan tradición, platos típicos e historia en los diferentes barrios de la Ciudad, ya dos cerraron sus puertas. Primero fue la Confitería del Hotel Castelar y ahora se sumó La Flor de Barracas.

“Estos establecimientos cumplen un rol social indiscutible. En su ámbito se preserva la cultura, la historia y las tradiciones de Buenos Aires. Son sitios esenciales para el porteño, se encuentran distribuidos en diversos barrios de la ciudad y son parte de su patrimonio cultural. Así fue establecido por la Ley Nro.35/98 que crea la Comisión de Protección y Promoción de los Cafés, Bares, Billares y Confiterías Notables de la Ciudad”, dice la resolución que los reconoce.

El Gobierno porteño, a través del Fondo Metropolitano de las Artes, cuya convocatoria abrió del lunes 4 de mayo al 18 de ese mes, decidió brindarles una ayuda que, desafortunadamente, será por “única vez”. A esto debe agregarse el pago de alquileres, personal y servicios públicos e impuestos. Dato no menor, es que las facturas de luz, agua y gas continuaron llegando a cada local aunque estos tengan sus puertas cerradas.  

José Palmiotti, responsable del bar La Perla, en el corazón de Caminito en el barrio de La Boca, a pocos metros de La Bombonera, ha decidido poner “esperanza” al difícil momento. En su cuenta de instagram subió un videomensaje para todos los turistas y amigos, en cada rincón de la Ciudad, del país y del mundo, que concurrieron o visitaron este lugar emblemático fundado en 1882, dejando latente que “allí estarán, para que cuando todo pase, seguir compartiendo buenos momentos”.

 

Fotografía por: Diario La Capital de Mar del Plata