El organismo se sumó hoy al PAMI y al Banco Central que ya utilizan este lenguaje en sus disposiciones, circulares y normativas internas.
La ANSES dispuso este miércoles 25 que comenzará a utilizar el lenguaje no sexista e inclusivo en todos sus documentos oficiales. Así fue dispuesto hoy por medio de la Resolución 418/2020 publicada en el Boletín Oficial, con la firma de su titular Fernanda Raverta.
En el artículo 1 de la resolución, se expresa “Dispóngase la utilización de lenguaje inclusivo y no sexista en toda la documentación oficial de la Administración Nacional de la Seguridad Social” y añade: “entiéndase por lenguaje inclusivo y no sexista aquel que evita el sesgo hacia un sexo o género en particular y que ni oculte, ni subordine, ni jerarquice, ni excluya a ninguno de los géneros y sea responsable al considerar, respetar y hacer visible a todas las personas, reconociendo la diversidad sexual y de géneros“.
La Administración Nacional de la Seguridad Social pidió, además, a la Dirección General de Proyectos de Niñez, Adolescencia, Juventud y Género, “la confección de un Manual de Estilo para la utilización de lenguaje inclusivo y no sexista, que contenga las normas necesarias para la redacción de la documentación (…) así como también orientaciones para su empleo y estrategias de aplicación“.
La ANSES, además, ratificó está decisión asegurando que “la igualdad de género requiere un proceso de aculturación modificatoria de los usos, costumbres y prácticas socialmente aprendidas, lo que debe encararse a partir de un cambio medular en las concepciones lingüísticas“.
Es por esto que advirtieron necesario “revisar la comunicación al interior y exterior del organismo” y que para ello, deberá:
- Eliminarse el lenguaje que se centra en los varones (androcéntrico) incorporado en los textos y hacer perceptible y transparente la labor de todas las identidades de género respetando su competencia o éxitos, en al ámbito laboral, social y político.
- Romperse con los estereotipos, respecto de la comunicación iconográfica y generarse una representación gráfica diversa y plural de los géneros, eliminando a los varones como únicos sujetos de acción y a las otras identidades como personas pasivas.
- Procurarse que la comunicación no sea excluyente y promueva enfoques integradores de todas las diversidades, debiendo primar un enfoque interseccional que contemple a toda la diversidad en términos generales, sin discriminar por raza, clase, orientación sexoafectiva, procedencia, etc.