El maquinista de la tragedia de Once admitió haber anulado el sistema de freno de hombre muerto

Marcos Córdoba aseguró que esa no fue la única causa del accidente, en donde murieron 51 pasajeros en 2012, ya que no le impidió “accionar los frenos manuales”.

El maquinista condenado por la tragedia en la estación de trenes Once, Marcos Córdoba, admitió haber anulado el dispositivo de freno “hombre muerto”, aunque aseguró que esa no fue la única causa del accidente en donde murieron 51 pasajeros, ya que no le impidió accionar los frenos manuales.

Lo declarado por Córdoba surge de la entrevista que le realizaron la psicóloga María Dolores Carbia y la trabajadora social Silvina Blanco, tras el pedido de su defensa para que se le conceda la libertad condicional, ya que está por cumplir las dos terceras partes de su condena.

Yo soy responsable de haber anulado el dispositivo del hombre muerto, pero eso no me impidió frenar el tren, yo activé los frenos manuales”, declaró Córdoba, según publicó la agencia estatal Télam, que tuvo acceso al informe oficial, quien fue condenado a tres años y tres meses de prisión de cumplimiento efectivo, por la tragedia ocurrida el 22 de febrero de 2012 en la que murieron 51 personas y más de 700 resultaron heridas.

La defensa del maquinista solicitó la nulidad del informe realizado por Carbia y Blanco por considerar que se excedieron en su contenido, pese a que la conclusión de ese estudio fue a favor del detenido, a quien le pronosticaron una “favorable de integración al medio libre“.

No sé si es justo o no, yo tengo responsabilidad, anulé el dispositivo, pero no lo hice a propósito, nunca imaginé que algo así podía ocurrir“, se sinceró Córdoba en la entrevista, y señaló: “Me cargaron culpas de otras personas. También son responsables los empresarios que no habían hecho las inversiones“.

La anulación del “freno del hombre muerto” ya había sido contemplada por el Tribunal Oral Federal (TOF) 2 cuando dictó la condena para Córdoba y otros acusados como el empresario Claudio Cirigliano y el exfuncionario Ricardo Jaime.

En aquel fallo se indicó además que la dimensión de la tragedia no había sido solo por la falta de pericia del conductor sino también por la falta de mantenimiento de los trenes y del sistema ferroviario en general, por lo que fueron condenados empresarios y exfuncionarios.