El Decreto de Necesidad y Urgencia firmado por Alberto Fernández contó con el respaldo del bloque del Frente de Todos, mientras que el interbloque opositor de Juntos por el Cambio votó en contra.

El Senado ratificó hoy la validez del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que establece como servicios públicos y esenciales a los Servicios de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) y el acceso a las redes de telecomunicaciones.

El DNU firmado por el Presidente Alberto Fernández contó con el respaldo de los 41 votos del bloque del Frente de Todos, mientras que los interbloques opositores Juntos por el Cambio y Parlamentario Federal votaron en contra.

A partir de su aprobación en el Senado, el instrumento quedará vigente, según informó la agencia estatal Télam, ya que la legislación establece que los DNU deben ser rechazados por ambas Cámaras del Congreso para concretar su eventual derogación.

Durante el cierre de la larga sesión que se extendió por más de diez horas, el jefe de la bancada oficialista, José Mayans, cuestionó en duros términos las críticas que hizo la oposición a la iniciativa oficial.

“Nosotros marcamos las pautas. El otro gobierno fracasó en todas las políticas públicas. Y ahora vienen a decirnos lo que tenemos que hacer. Déjennos gobernar. Nosotros vamos a marcar las prioridades del gobierno”, enfatizó Mayans.

El jefe del bloque del Frente de Todos también defendió el DNU sobre las TIC argumentando que lo que se busca “es que las prestatarias de servicios sólo deban fijar precios justos y razonables”.

“El presidente está diciendo: un poquito menos ganen. ¡Esta gente quiere ganar en dólares!”, advirtió, en referencia a las empresas involucradas.

Por su parte, el jefe del interbloque de Juntos por el Cambio, el radical formoseño Luis Naidenoff, justificó la negativa de la oposición a acompañar el DNU argumentando que “tiene enormes irregularidades” porque “fue dictado apenas un día antes de la convocatoria a la reunión de la Bicameral” y “no fue elevado a los legisladores”.

Naidenoff también recordó “la fusión Cablevisión-Multicanal” facilitada el 7 de diciembre de 2007, durante el gobierno de Néstor Kirchner. “Ustedes consolidaron a una empresa que era la mitad del mercado del cable”, sostuvo el radical.

La oficialista mendocina Anabel Fernández Sagasti, en tanto, afirmó que “este DNU no intenta sacarle las ganancias a nadie, sino que todos tengan el acceso a un derecho humano”, recordó que el gobierno de Mauricio Macri derogó parte de la Ley de Tecnologías de la Información votada durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, como modo de “pagar el favor” de los medios que “le hicieron la campaña”.

“Esta es una decisión política que señala a quién representa cada uno. Está claro a quién representa la oposición y a quién el oficialismo”, sentenció Fernández Sagasti.

Previamente, Martín Lousteau vaticinó que “este DNU genera incertidumbre y discrecionalidad” y que “atenta contra las inversiones que necesitamos”, y argumentó su oposición a la iniciativa al señalar que “el 44 por ciento de los hogares argentinos o no tiene agua de red o no tiene cloacas o no tiene gas y esos también son servicios públicos”.