La iniciativa impulsada desde el gobierno de Alberto Fernández obtuvo un amplio respaldo de todos los bloques. Ahora fue girada a Diputados para su sanción definitiva.
El Senado aprobó ayer con un amplio respaldo de todos los bloques el proyecto de ley que establece que las negociaciones en materia de deuda pública con cualquier tipo de financiación internacional, incluidos los acuerdos con el Fondo Monetario Internacional (FMI), deben contar con aval parlamentario.
La iniciativa que fue impulsada por el Poder Ejecutivo recibió 65 votos favorables y una sola abstención, la del representante de Juntos Somos Río Negro, Alberto Weretilneck, habitual aliado del oficialismo, y ahora fue girada a la Cámara de Diputados, para su sanción definitiva.
El proyecto determina que “la Ley de Presupuesto General de la Administración Nacional de cada ejercicio deberá prever un porcentaje máximo para la emisión de títulos públicos en moneda extranjera y bajo legislación y jurisdicción extranjeras respecto del monto total de las emisiones de títulos públicos autorizadas para ese ejercicio”.
En ese sentido, establece que toda emisión de títulos públicos en moneda extranjera y bajo legislación y jurisdicción extranjeras que supere dicho “porcentaje requerirá de una ley especial del Honorable Congreso de la Nación que la autorice expresamente”.
En el artículo segundo dispone que “todo programa de financiamiento u operación de crédito público realizados con el Fondo Monetario Internacional (FMI), así como también cualquier ampliación de los montos de esos programas u operaciones, requerirá de una ley” del Congreso “que lo apruebe expresamente”.
El tratamiento del proyecto que fue impulsado desde el gobierno de Alberto Fernández se produce en momentos en que su ministro de Economía, Martín Guzmán, se encuentra en plena negociación para alcanzar un nuevo programa financiero por la deuda de US$ 44.000 millones de dólares que contrajo el gobierno de Mauricio Macri.
Al proyecto original los senadores del bloque oficialista del Frente de Todos le agregaron un artículo -el tercero- en el que se establece que las divisas que ingresen al país como parte de un acuerdo de crédito no podrán ser utilizadas para gastos corrientes, según informó la agencia estatal Télam.
Al defender la iniciativa, el presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda del Senado, el peronista cordobés Carlos Caserio, cuestionó al FMI al que acusó de exigir planes de pago que “siempre fueron a pérdida para los argentinos”.
“No queremos que el FMI nos traiga soluciones que siempre fueron a pérdida para los argentinos”, dijo Caserio.
El legislador oficialista sostuvo que el Fondo Monetario Internacional “tiene que entender que si es acreedor, y quiere cobrar, debe crear condiciones para que la Argentina pueda pagar”.