Mientras que la ministra de educación porteña Soledad Acuña y el jefe de gobierno de la CABA no desaprovecharon ninguna ocasión para demostrar públicamente lo preparados que estaban los establecimientos educativos para la vuelta a la presencialidad, la realidad de los gremios docentes que viven desde adentro un retorno más marcado por el fogoneo mediático que por cuidados reales, fue muy diferente a la de la foto.
“El regreso a la presencialidad en la Ciudad de Buenos Aires estuvo marcado por la desorganización, las aglomeraciones que se repitieron en numerosas escuelas de la Ciudad, y la falta de insumos suficientes para hacer frente a la pandemia en los edificios escolares”, reconocieron desde UTE-Cetera tras un relevamiento.
Por su parte, Larreta y Acuña aseguraron que se cumplieron rigurosamente los protocolos y que el presentismo de les estudiantes fue de un 89%.
Las declaraciones de los mandatarios se producen mientras que en el noticiero del mediodía una familia asegura con su hijo en brazos que si ese día se presentó en la escuela fue sólo para no perder la vacante que le costó 2 años conseguir. A su vez, agradecen a les docentes que volvieron al ruedo en lo presencial, pero si no lo hacían se les descontaba el día.
El miércoles por la tarde, acompañado de Diego Santilli y Soledad Acuña, Horacio Rodríguez Larreta dio una conferencia donde reconoció: “Estábamos convencidos de la necesidad de que vuelvan a las clases en forma presencial y, por supuesto, en forma cuidada. Tanto en la escuela que yo visité como en otras se cumplieron rigurosamente los protocolos. Ya llevamos 12 mil docentes testeados. Hubo 88 casos que dieron positivo. Hay 8500 que ya tienen turno”, indicó.
Por su parte, Acuña declaró que “algunas escuelas no terminan de ser lo que nos gustaría”, refiriéndose a que no acuden todos los niños y las niñas todos los días. Pero agregó: “Algunas hicieron propuestas de alternancia (algunos días, sí; algunos días, no). Nosotros queremos que vayan todos los días y esto va a pasar”.
“Quizás en algún momento un grupo tendrá que restringir la presencialidad porque hay algún contagio. Quizás en algún momento tengamos que restringir toda la presencialidad, pero vamos a volver”, indicó la ministra. “El año pasado no estudiaron los que quisieron. Estudiaron los que pudieron”, agregó.
Mientras los números de instituciones educativas de todos los niveles que no pudieron abrir sus puertas por casos positivos de COVID 19 se incrementa, desde el Grupo “Padres autoconvocados por el regreso seguro a la escuela” observaron que, por ser un comienzo escalonado, hay escuelas en las que alcanzaron los espacios en el primer día, pero esto no está garantizado cuando se sumen el resto de los niveles, la semana próxima.
Por otro lado, en diálogo con Página 12, Mariana Scayola, secretaria general de Ademys, informó que el próximo martes habrá un paro de 72 hs. Una de sus críticas se centra en lo que fue el uso del transporte público en este primer día de clases presenciales. Las filas interminables como recordatorio de algo que piden hace mucho: una flota de micros para que puedan trasladarse sin necesidad de utilizar el transporte público.
Para finalizar, cerró: “Hoy se dio un contagio confirmado en una escuela donde la conducción quedó aislada a partir de un caso positivo”, refiriéndose al Comercial 21 del Distrito Escolar 11. La secretaria general de Ademys consideró que “el Gobierno porteño debió reconocer que el protocolo era impracticable y que la apertura de todas las escuelas y de todos los grados iba a traer problemas. Por lo tanto, lo que hubo fue una apertura parcial”.
Foto: Página 12